Viernes por la tarde...
Estaba yo muy quitado de la pena, cómo quien dice, sentadito en el Parque Nacional cuando a lo lejos por la esquina sureste aparece un chavalillo delgado, moreno, con ropa limpia, un maletin al hombro y una cajita de herramientas en la maño derecha.
Qué hombre más guapo!!!! pensé para mis adentros, cual fue mi sorpresa al ver que el tipo me estaba dando bola... si a mi, este flacuchin, bronceado había llamado la atención de aquel hombronazo tan recio.
Hubiera jurado ante cualquier instancia júdicial que era heterosexual... aquel chico pintaba más a modelo sin ser descubierto que a gay que busca con quien aparearse.
Hablamos 3 minutos durante los cuales le di mi número de teléfono, le eché un buen vistazo, gire sobre mis pies y me fui.
Sábado por la tarde...
Después de una agotadora clase de natación me fui al cine de Multiplaza, no recuerdo que película fui a ver, el asunto es que al salir de la sala mi teléfono vibró, veo la pantalla y era una llamada por cobrar... WTF??? Era el chico del parque (bauticémoslo Erick), sí tenía el descaro de llamar a cobrar... quería que nos vieramos, fueramos a tomar algo o a hacer algo (eso sí a él no le habían pagado aún - cosa que me empezó a oler mal)... Llegué a San José tan pronto como pude y ahí estaba Erick... ropa limpia, afeitado, con su cajita de herramientas en mano, con un fragante olor a limpieza.
-Mae quiero una birra- me dijo - vamos al bar que está ahi del otro lado de la cuadra -.
Caminamos al bar, entramos, buscamos acomodo y cuando la mesera nos atendió le pedimos dos rock en botella... debíamos aparentar ser bien machos. Después de la cuarta cerveza me miró con aquellos ojos negros y me dijo coquetamente - ¿Y ahora qué quiere hacer? - yo aproveché el momento para decirle que me encantaría verlo desnudo y conocer aquel cuerpo que me intrigaba.
- ¿Sólo para eso quería verme? - dijo. Qué putas!, pensé si fue él quién me llamó diciendo que nos vieramos.
- No Erick, yo sólo decía, si te ofendí disculpame.- dije quedando como el depredador del que nunca me he sentido culpable de ser. Dos cervezas, una hora y muchos silencios más tarde Erick rozó me rodilla con la punta de sus dedos y me dijo - ¿Y qué quiere hacerme? -. La verdad aquel macho me provocaba que me cogiera, que me partiera en cuatro el culo y disfrutara de mi a su gusto y fue precisamente lo que le contesté.
Decidimos ir a un hotelito cercano... un cogedero de a rato... al entrar a la habitación nos percatamos de que la luz del baño no servía (yo que pensaba dejar la puerta del baño abierta y la luz encendida para no quedar en la penumbra). Erick me pidió que apagara la luz, que no lo besara y se desnudó, se acostó boca arriba y cruzó sus manos detrás de la cabeza - un manos atrás dije -.
Me desnudé y me lancé a la aventura de coger con aquel hombre delicioso, medio borracho pero rico que estaba tendido en la cama... imagínense mi sorpresa cuando el soldado que había sido llamado a la batalla yacía flacido cual globo desinflado sobre la piel de Erick. De mí nunca se ha dicho nada y mi boca empezó a lamer aquel soldadito muerto intentnado levantarlo... cuando ibamos a medio camino entre la tierra y la gloria aquel juguete no cabía en mi boca y ya imaginaba tenerlo en el culo.
- Mae verdad que me va a soltar algo por la cogida - me dijo.
- Mae digame que me está vacilando - y seguí mamando.
- Mae no, ayudeme con algo no ve que no me pagaron -
HORRORRRRRRRRRSHHHHHHHHHH YO PAGANDO POR SEXO!!!!!!! JAMÁS!!!!!!
Me saque olimpicamente aquella picha colosal de la boca y le dije - mae vistase, recoge sus cosas y se va - a lo que Erick me contestó -mae lo espero afuera por que sin la plata no me voy - mis carcajadas fueron tan altas que de una habitacion contigua se escuchó un ssshhhhhhh amonestador.
Erick se vistió, salió de la habitación y me indicó que me esperaba en la entrada del hotel. Yo no sabía que hacer, era tarde, él era mucho más grande y fuerte que yo... me iba a robar sin mucha complicación, entonces decidí dejarlo esperando, que se cansara y se fuera. Media hora después la habitación del intento fallido fue alquilada a otra pareja, ellos entraron, duraron aproximadamente una hora y media adentro y salieron recién bañados. Yo aún estaba comentando mi desdicha con la recepcionista del hotel... aproveché que la pareja bajó las estrechas gradas y bajé trás ellos...
Con el mayor miedo del mundo, vigilando por si Erick tenía esa resistencia y había esperado dos horas en la acera del hotel. No estaba... caminé hasta la esquina y tomé un taxi directo a mi casa...
Por poquito y trás de chuleado hubiera salido asaltado...